La sinergia en los trabajos grupales

Seguramente has escuchado hablar de la sinergia. ¿Qué es? Pues, para no meternos en el terreno de las definiciones, diremos que es un factor clave en los trabajos grupales. Sinergia es una palabra que nos llegó del idioma griego y que traducido a nuestro español significa «cooperación», «trabajo en conjunto».
Cuando vamos a realizar un trabajo en conjunto, previamente tenemos que observar cuánta sinergia podemos lograr en dicho grupo. Descubrir esto es clave. El éxito, de la tarea que nos encarguen, dependerá del trabajo o esfuerzo conjunto que realicemos.
Los roles en el trabajo en equipo

Lo que hemos dicho en el párrafo anterior no significa que, para garantizar la buena marcha del equipo, nuestros trabajos grupales siempre los realicemos con nuestros amigos. No siempre será así. Mas bien, casi siempre tendremos que ser parte de un grupo en el cual habrá personas con las que tendremos que lidiar.
Ya que no siempre podemos elegir a las personas más afines a nosotros, tendremos que aprender a cultivar la confianza. La confianza es otro elemento clave en el trabajo en equipo. En ese aspecto es importante dedicarnos a conocer de manera personal a los miembros del grupo. Sobre todo, para conocer en qué aspectos esa persona es muy buena. Una vez descubierto esa capacidad de la persona, el grupo puede asignarle un rol. De esa manera, cuando cada uno asuma su rol, el grupo podrá alcanzar más fácilmente su objetivo.
El líder o la lideresa del grupo

Para ser parte de un buen equipo y realizar trabajos grupales exitosos, es necesario que el grupo elija a la persona correcta como líder. Todo grupo humano necesita de una persona que impulse a la gente hacia la consecución de algún objetivo. Esa persona, es el líder o la lideresa. El líder desempeña el rol y la responsabilidad de conducir hacia el logro de las metas.
La persona que será designada como líder tiene que tener, por lo menos, dos cualidades que son vitales: responsabilidad y seguridad en la toma de decisiones. Este líder no es una persona que se coloca por encima de los demás sino que trabaja codo a codo con el equipo. Es parte del equipo y sabe escuchar, dialogar y guiar.
Sin una buena comunicación…¡muy difícil!

Finalmente, para ser parte del mejor grupo y realizar buenos trabajos grupales, se necesita que haya una buena comunicación. Imagínate un equipo en el cual a las personas les cuesta comunicarse. Con esto queremos decir que tenemos que aprender a escuchar, respetar las opiniones que son distintas a las nuestras.
Por una buena comunicación, entendemos que la comunicación entre los miembros del equipo debe de fluir. No deben de existir «cuellos de botellas» o «embotellamientos». Hemos visto como gobiernos, familias e instituciones fracasan y no logran sus objetivos, tan solo por no practicar una buena comunicación.
¿Quieres ser parte del mejor grupo? Busca estas características: Sinergia, que cada uno desempeñe su papel, liderazgo y comunicación.