Los millones de peruanos con falta de salud mental

Nos estamos acercando rápidamente a los dos años de emergencia sanitaria debido a la COVID-19. En este contexto, necesitamos ver urgentemente la importancia de la salud mental en nuestras vidas. Debemos recordar que antes de la pandemia, nuestro país ya presentaba cifras preocupantes en ese terreno. En el 2019, la Defensoría del Pueblo, nos informaba que son más de 4 millones de peruanos los que tenían algún problema de salud mental. ¿Por qué es importante salvaguardar esta área de nuestra vida? Sigamos leyendo…
Violencia y la importancia de la salud mental

Ese mismo año (2019) el MINSA publicó un informe más preciso para decirnos que en realidad son más de seis millones de peruanos que requieren atención médica relacionada a problemas de salud mental. Esa es la realidad. La falta de salud mental en la actualidad afecta a cerca del 20% de habitantes de nuestro país. Este porcentaje sufre de trastornos de depresión, ansiedad, estrés u otros más complejos.
La importancia de la salud mental queda demostrada por el hecho de que estos trastornos u otros más complejos, casi siempre terminan ocasionando adicciones y episodios de violencia. Tragedias de las cuales nos enteramos casi todos los días a través de los noticieros.
Capacitados para afrontar las luchas de la vida

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la importancia de la salud mental radica en el hecho de que gracias a ella podemos «afrontar las tensiones normales de la vida». Nuestro mundo está rodeado de tensiones, situaciones críticas, circunstancias adversas, dificultades, obstáculos que son inevitables. Imagínate que estuviéramos incapacitados para afrontar esos vaivenes de la vida. ¡Estaríamos perdidos! Nos hundiríamos en el fracaso.
Recordemos por ejemplo que Ayacucho, fue la región más afectada durante la época del terrorismo. Hoy en día, esta zona andina del Perú tiene la mayor prevalencia de trastornos mentales (50.6% de la población con enfermedades mentales) de todas las regiones del Perú.
Falta de salud mental e improductividad

Pero la falta de salud mental también tiene repercusiones muy lamentables en nuestro trabajo o quehaceres habituales. Una persona que no goza de buena salud mental no puede trabajar de forma productiva y fructífera. Por eso, cuando se habla de la importancia de la salud mental se ha llegado a decir que «la salud física, sin la salud mental, no tiene sentido».
Lamentablemente una persona con falta de salud mental es incapaz de hacer una contribución a la sociedad, como es la responsabilidad de cada ciudadano. Esa es una de las razones por las cuales a las personas afectadas mentalmente se les considera como discapacitados. En ese sentido se necesita mucho que las diversas organizaciones (educativas, religiosas) promuevan hábitos saludables y seguros que ayuden a conservar una mente sana.
La otra pandemia

La ciencia médica, desde el año pasado, nos ha advertido que luego de la pandemia de la COVID-19, habrá una pandemia de enfermedades mentales. Y es cierto. Todos, de una u otra manera, hemos sido golpeados de manera directa o indirecta por este flagelo sanitario. Es importante que recuperemos o mantengamos la salud mental a fin de que nuestra familia, la sociedad y el país sigan contando con nuestro aporte.
Necesitamos enfocarnos en el manejo del estrés, así como la prevención de la ansiedad y la depresión. Todos ellos son los enemigos principales de la salud mental.